jueves, noviembre 25, 2004

Anécdotas al volante

Lo que voy a contar es una chorrada, pero no veas que susto me llevo cada vez que me pasa. Aunque al menos ya sé que soy yo...
En los otros coches que he conducido antes, el claxon, bocina o pito (como se llama también por aquí...) no estaba en el volante, sino a uno de los lados en una palanca.
En mi nuevo coche, que ya habéis visto por ahí, está en el volante...
Algún día he ido conduciendo y me he apoyado sin darme cuenta encima del volante (una postura un poco rara) y claro ha sonado el claxon, bocina o pito... y me he llevado un susto de muerte...
Así no tiene mucha gracia, pero un día iba hablando con mi jefe por el móvil (con el manos libres) y de repente me pitan, me lío a mirar para todas partes, porque me asusté... y al final me di cuenta de que era yo... una situación un poco ridícula...
En fin... una locura...